domingo, 20 de noviembre de 2011

RETRATO DE UN SIGLO ¿COMO SER MEXICANO EN EL SIGLO XIX

Para Empezar…



Toda nacionalidad es un misterio, toda colectividad esta llena de enigmas. Las bases del Estado- nación que hoy conocemos como República Mexicana se plantean a fines del siglo XVIII y se consolidan a lo largo del siguiente siglo. Durante este proceso surgen y adquieren sentido vocablos como el gentilicio de mexicano, construcciones ideológicas como la del nacionalismo mexicano y el concepto mismo de lo mexicano.

A lo largo de la historia se ha ido formando la imagen del mexicano desde la época de la nueva España surgía la  discriminación en contra del mexicano ya que se conocía por ser indio, salvaje y por servir al rey, su lugar era servir a los miembros de otras clases sociales con poder. Así es como se ha ido modificando pero hasta nuestros días todavía surge la discriminación en contra del mexicano y en contra de sus costumbres, aunque por otro lado también hay partes buenas, ya que al mexicano se le  considerada solidario y buen anfitrión, ya que siempre tiene modo para recibir a extranjeros (aunque no lo haga con otros mexicanos).

Después de haber consumado su Independencia, se había dejado atrás sus fisonomías indígena y colonial. Ya no lo definían ni Tenochtitlán ni Nueva España, aunque ambos lo hubiesen forjado. Ahora surgía un nuevo México, que en el siglo XIX vivió un período de luchas internas, dos invasiones extranjeras (la francesa y la norteamericana) y una guerra civil que terminó con el triunfo de los liberales y el gobierno de Juárez.

Desde que México nace como país independiente, entre los mexicanos se dan diversas manifestaciones culturales que constituyen una constelación compleja de ideas, de forma y estilos de pensar, hacer, concebir, ver, escuchar, representar, cocinar, degustar, disfrutar, leer, gozar, sufrir, en fin de vivir. Este conjunto de preferencias, logros, rechazos y fracasos culturales conforman el universo amplio y diverso de lo mexicano.

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